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BMW M3 Competition 2021 (G80)

Escrito por: Víctor M. Fernández - 9 noviembre 2020

Dirección variable “M Servotronic” y nuevos frenos regulables

La elevada rigidez torsional de la estructura delantera ha permitido ofrecer una respuesta especialmente rápida y precisa de la dirección, contando de serie con el sistema “M Servotronic” que ahora combina la asistencia electromecánica de dureza variable con la desmultiplicación variable del giro.

Dicha desmultiplicación variable depende del ángulo de giro del volante y contribuye a proporcionar una mayor sensación de estabilidad en el inicio de los giros, al mismo tiempo que aumenta la rapidez de dirección conforme se incrementa el giro (va cambiando la desmultiplicación de la cremallera de dirección), ofreciendo así una dirección muy directa, rápida y sensitiva con pocas vueltas de volante.

El conductor también puede recurrir al menú “M Setup” (mediante el botón específico situado en la consola central) para seleccionar dos posibles niveles de asistencia de la dirección (“Confort” o “Sport”) en función de sus gustos o preferencias puntuales.

El mismo botón “M Setup” sirve también para acceder a una de las novedades del BMW M3 Competition, la posibilidad de seleccionar entre dos posibles ajustes del tacto de frenada (“Confort” y “Sport”).

El nuevo modelo lleva de serie un sistema de freno integrado (similar al estrenado en los BMW M5 y BMW M8), en donde las funciones de activación de los frenos, la servoasistencia y el control de la frenada se reúnen en un nuevo módulo de control que suministra la presión de frenada mediante un actuador eléctrico (asegurando también una actuación más rápida y precisa del control de estabilidad).

El sistema de frenada integrada permite al conductor dosificar la presión de frenada con mayor precisión y el tacto del pedal no se ve alterado por las condiciones de la carretera (asfalto seco o mojado), grandes aceleraciones laterales (que pudieran desplazar las pastillas) o altas temperaturas del equipo de frenos (que suelen deteriorar el tacto de frenada).

Además, dicha tecnología ha permitido que el conductor pueda seleccionar entre los dos ajustes de frenada antes mencionados, que modifican la presión que se ejerce sobre el pedal de freno para detener el coche.

El ajuste “Confort” ofrece una respuesta de frenada más progresiva y orientada al confort en el uso cotidiano, mientras que el ajuste “Sport” ataca con más mordiente e intensidad la frenada para obtener un tacto más deportivo (las distancias de frenada son similares en cualquiera de los dos ajustes).

No obstante, a pesar del incremento de peso en el nuevo BMW M3 Competition, el equipo de frenos mantiene los mismos discos “BMW M Compound” de construcción compuesta (disco de fricción en fundición gris y corona interior de aluminio) que llevaba el anterior BMW M3 Berlina “F80”, con discos ventilados y perforados en las cuatro ruedas, de 380 x 30 mm (diámetro x espesor) delante y 370 x 24 mm detrás.

Dichos discos están amordazados ahora por unas pinzas fijas de aluminio de seis pistones en las ruedas delanteras y unas nuevas pinzas flotantes monopistón en el eje trasero (el anterior BMW M3 Berlina llevaba pinzas fijas en las cuatro ruedas, de cuatro pistones delante y doble pistón detrás), que están pintadas de serie en color azul pero se pueden pedir, opcionalmente, en color negro o rojo (siempre con el anagrama “///M”).

Tampoco hay cambios en los discos carbono cerámicos disponibles en opción (“BMW M Carbon Ceramic”), también ventilados, perforados y de construcción flotante en las cuatro ruedas, con unas imponentes dimensiones de 400 x 38 mm delante y 380 x 28 mm detrás (diámetro x grosor).

Sus pinzas de aluminio con seis pistones son también fijas el eje delantero, pero recurre a una nueva pinza flotante monopistón en el eje trasero (fijas de cuatro pistones en el anterior BMW M3 Berlina “F80”), manteniendo el mismo color dorado metalizado en su decoración final.

El equipo de frenos carbono cerámicos se ofrece exclusivamente dentro del paquete opcional “M Race Track”, ofreciendo la ventaja de ser más resistentes al sobrecalentamiento para su uso intenso sobre circuito y también mucho más ligeros que los discos de fundición gris que lleva de serie.