Carrocería ligera, aerodinámica y deportiva
Con 4.689 mm de longitud, 1.942 mm de anchura y 1.293 mm de altura, las proporciones de la carrocería del BMW i8 y su perfilada línea exterior transmiten de forma evidente su condición de coche deportivo. El matiz estilístico lo remata la apertura de sus puertas basculando hacia arriba.
Pero, la labor de los diseñadores, no se ha limitado a ofrecer tan solo un diseño llamativo, sino que también se ha trabajado a fondo en el túnel de viento para reducir la resistencia aerodinámica a un valor realmente satisfactorio (Cx 0,26).
El equipo de ingeniería ha entrado también en juego para reducir el centro de gravedad del vehículo hasta tan solo 460 mm de altura, mientras que la distribución de pesos se ha equilibrado casi al 50 por ciento en ambos ejes, separados por 2.800 mm de batalla y con un ancho de vía de 1.644 mm delante y 1.715 mm detrás.
En la lucha contra el peso se ha recurrido a materiales livianos en la mayor parte de sus piezas. De esta manera, además de la estructura de las puertas y la jaula del habitáculo (módulo “Life”) realizadas en fibra de carbono, también se ha recurrido al aluminio en la confección del chasis (módulo “Drive”) y ambos trenes de rodaje, mientras que la estructura portante del salpicadero está fabricada en magnesio. La chapa exterior de las puertas es de aluminio y el resto de los paneles de la carrocería son de material sintético que, además de ahorrar peso, también soportan pequeños golpes cotidianos sin deformarse.
Para la fabricación de las llantas de aleación de 20” que lleva de serie el BMW i8 se ha empleado el aluminio forjado (más ligero que el aluminio fundido) y su diseño no solo pretende aportar un valor estético sino que también se han optimizado a nivel aerodinámico.
Pero los ingenieros de BMW han dado un paso más allá en la lucha contra el peso, desarrollando unas llantas opcionales para el BMW i8 que están fabricadas en plástico reforzado con fibra de carbono. Dichas llantas son exclusivas de este deportivo híbrido y ahorran 3 kg de peso cada una, optimizando así las masas no suspendidas en cada rueda.
Con todo esto, el peso final se ha establecido en 1.490 kg, un valor realmente satisfactorio teniendo en cuenta el elevado peso del conjunto de baterías.
