El Lotus 3-Eleven es un radical deportivo biplaza, disponible en versión de carretera (“Road”) y en versión de competición (“Race”), ambas desarrolladas por los ingenieros de Lotus Motorsport. Según la marca británica, es el coche de calle más rápido y potente que han fabricado hasta la fecha (también el más caro).
El nuevo modelo es un eficaz sucesor del anterior Lotus 2-Eleven de 255 CV (2008) y sus características técnicas están claramente enfocadas a obtener las máximas prestaciones y eficacia en conducción deportiva.
Para ello cuenta con un motor V6 3.5 sobrealimentado que desarrolla una potencia de 457 CV a 7.000 rpm y un par máximo de 450 Nm entre 3.500 y 6.500 rpm.
Dicho propulsor de origen Lexus/Toyota está ubicado en disposición central trasera y es una nueva evolución del empleado en el Lotus Evora 400 (406 CV). Cuenta con inyección indirecta de gasolina, distribución variable “VVT-i” y un compresor volumétrico refrigerado por un “intercooler agua-aire” que le ha permitido desarrollar una elevada potencia específica de 132,2 CV/litro.
La transmisión manual de seis velocidades de la versión “Road” pasa a ser secuencial automatizada en la variante “Race” de carreras, que deja seleccionar las marchas a través de unas levas situadas detrás del volante (fijas en la columna de dirección). Además, un diferencial autoblocante “Torsen” se encarga de aportar la máxima capacidad de tracción a las ruedas traseras.
Basado en la versión “Road” de carretera, el Lotus 3-Eleven Race (de competición) incluye un paquete aerodinámico más evolucionado, que tiene un faldón delantero más prominente, un alerón trasero más grande (con incidencia regulable) y una cubierta específica para la zona del pasajero, junto a la caja de cambios secuencial de seis marchas, un asiento bacquet con cinturones de seguridad de arnés de seis puntos, un dispositivo cortacorriente y un extintor contra incendios.
Según las mediciones de Lotus, la versión “Race” alcanza un apoyo aerodinámico que supera los 215 kg a 240 km/h, adaptándose así a un paso por curva mucho más rápido y una capacidad de frenada superior sobre circuito.
Fieles a la filosofía del fundador de Lotus, Colin Chapman (“no me des potencia, quítame peso”), el Lotus 3-Eleven ha sido fabricado en materiales ligeros, para mostrar en la báscula un peso en vacío inferior a 900 kilogramos (en la versión “Race”).
El chasis monocasco es de aluminio y el conjunto de su carrocería (sin techo, ni puertas, ni parabrisas delantero) está confeccionada con elementos fabricados en una nueva resina “composite” que ha permitido aquilatar el peso al máximo (es un 40% más ligera que el plástico reforzado con fibra de vidrio). Además, en la versión “Race” se ha recurrido a la fibra de carbono para la fabricación del faldón delantero, el alerón trasero y la estructura del asiento bacquet. El robusto arco antivuelco, situado detrás de los asientos, no solo cumple una función de seguridad, sino que también se ha perfilado para que aporte cierta carga aerodinámica.
La suspensión del Lotus 3-Eleven está configurada por dobles triángulos independientes en las cuatro ruedas, que disponen de amortiguadores Öhlins regulables, muelles Eibach y una barra estabilizadora de flexibilidad variable en el eje delantero.
El dispositivo de frenada está equipado por discos ventilados y rayados de construcción flotante aligerada (disco de fundición gris y campana interior de aluminio), con 332 mm de diámetro en las cuatro ruedas y mordidos por pinzas monobloque de aluminio de cuatro pistones, desarrolladas por “AP Racing” (las versiones “Race” llevan pastillas de freno específicas para rodar en circuito).
El trabajo de aligeramiento también está presente en sus llantas de 18” delante y 19” detrás, fabricadas en aluminio forjado y montadas sobre neumáticos en medida 235/40 R18 y 265/35 R19 respectivamente (Michelin Pilot Sport Cup 2 de tipo “semi-slick” en la versión “Race”).
Con todo esto y una espectacular relación peso/potencia de 1,97 kg/CV, las prestaciones del Lotus 3-Eleven son dignas de un súper deportivo, con una aceleración de 0 a 100 km/h que ronda los 3,0 segundos y una velocidad máxima de 290 km/h en la versión “Road” y de 280 km/h en la versión “Race” (algo inferior por su mayor carga aerodinámica).
El 3-Eleven es también el vehículo de producción de Lotus más rápido sobre su circuito de pruebas en Hethel, con un tiempo por vuelta de 1 minuto 22 segundos (1 m 32 s en el Lotus Evora 400 y 1 m 38 s en el Lotus Evora S).
En el “cockpit”, el nivel de equipamiento está reducido a la mínima expresión, propia de un coche de carreras, en donde el volante “Momo Tuner” es extraíble (para facilitar el acceso al puesto de conducción) y la instrumentación está configurada por una pantalla en color “TFT” que permite al conductor seleccionar entre diversos menús de información, con modo “Road” (carretera) y “Race” (competición).
El Lotus 3-Eleven se va a fabricar en edición limitada a 311 unidades, todas ellas montadas a mano en las instalaciones de la marca en Hethel (Norfolk – Inglaterra). Su producción dará comienzo a partir de febrero de 2016 y las primeras entregas se realizarán desde abril de 2016, con un precio en España que rondaría los 125.300 euros en el Lotus 3-Eleven Road (de calle) y los 176.000 euros en el Lotus 3-Eleven Race (de competición), sin duda un precio tan exclusivo como elevado, teniendo en cuenta su reducido nivel de equipamiento.
