Síguenos

SRT Viper

Escrito por: Víctor M. Fernández - 9 mayo 2012

Tres generaciones de “vibora”

Cuando el grupo Chrysler presentó el Viper Concept Car en el Salón de Detroit de 1989 ya tenían claro que sería todo un éxito. Unas semanas después de la exposición, la directiva tomaba la decisión de llevarlo a la producción en serie.

El Viper nacía con la intención de convertirse en el sucesor del mítico AC Cobra (el propio Carroll Shelby participó en el desarrollo del vehículo) y solo tres años después llegaba al mercado. El Viper RT/10 tenía una carrocería tipo “roadster” y llevaba un imponente motor V10 de 8 litros de cilindrada que provenía de un vehículo industrial. Tras una importante remodelación mecánica, dicho propulsor desarrollaba 408 CV a 4.600 rpm y un par máximo de 630 Nm a 3.600 rpm. La carrocería estaba realizada en fibra de vidrio y el peso total del conjunto no superaba los 1.490 kilogramos. Con semejante relación peso/potencia (3,65 kg/CV) se convertía en uno de los coches más rápidos de su época y alcanzaba una velocidad máxima que se acercaba a los 300 km/h.

El Viper RT/10 se labró rápidamente la fama de coche rudo y con carácter, al carecer de ningún tipo de ayuda electrónica a la conducción, resultar espartano en su interior y ofrecer un nivel de confort mejorable, aunque a cambio era todo un torrente de sensaciones y mostraba un comportamiento mucho más ágil y eficaz de lo que aparentemente hacía presuponer su “musculosa” carrocería.

En 1996, la marca americana ponía además a la venta una nueva versión del Viper con carrocería cupé. El Viper GTS recibía no solo un techo duro, sino que también incrementaba la potencia de su propulsor V10 hasta los 450 CV y contaba con destacables mejoras en el chasis y la suspensión que lo hacían todavía más eficaz, siendo en modelo elegido por la marca para competir de forma oficial en los principales campeonatos de resistencia de todo el mundo. El Viper GTS-R de carreras tenía un peso mínimo de 1.100 kilogramos y llegó a contar con una potencia de aproximadamente 630 CV en las últimas evoluciones (con la brida restrictora de admisión impuesta por el Campeonato FIA GT y similar a la utilizada para las 24 Horas de Le Mans).

El Viper RT/10 y Viper GTS se dejaron de fabricar en 2002, para dejar paso en 2003 a la segunda generación del modelo. El nuevo Viper pasaba a denominarse SRT-10 y se ofrecía inicialmente con carrocería descapotable tipo “roadster” (con techo de lona), mientras que el Viper SRT-10 Coupe se haría esperar hasta 2006. Su motor V10 contaba ahora con 8,3 litros de cilindrada y alcanzaba una potencia de 506 CV a 5.600 rpm. Poco cambiaba a nivel “confort” en este vehículo, que seguía siendo parco en equipamiento y poco cuidado en revestimientos interiores y detalles de acabado. Tampoco tenía ni control de tracción ni control de estabilidad, mostrando un carácter exigente cuando no se sabía dosificar con acierto semejante chorro de potencia, aunque su comportamiento resultaba realmente eficaz en manos de los conductores más experimentados.

En 2008, el Viper recibía mejoras en su motor V10: se incrementaba la cilindrada hasta 8,4 litros, se adopta un sistema de distribución variable y se optimiza el sistema de alimentación para alcanzar los 612 CV a 6.100 rpm, marcando así una velocidad máxima de 325 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h por debajo de los 4,0 segundos. El incremento de potencia obliga a introducir una nueva caja de cambios “Tremec TR6060” y el anterior diferencial autoblocante “Dana” se sustituye por un “GKN Visco Lok” que mejora la capacidad de tracción. Todo esto, junto con la nueva puesta a punto de las suspensiones permite ofrecer un coche todavía más rápido y eficaz frente a sus rivales contemporáneos.

Tanto el Viper SRT-10 Coupe como el Viper SRT-10 Roadster de la segunda generación se dejaron de fabricar en 2010, para dejar paso en 2012 al nuevo SRT Viper, en su tercera generación. Desde 1992, todos los Viper han sido fabricados en la factoría de “Conner Avenue” en Detroit (EEUU), de cuyas instalaciones han salido hasta la fecha cerca de 28.000 unidades.

Con dato curioso cabe apuntar que, en cada generación del Viper, el dibujo de la “víbora” ha sido diferente, asemejando su imagen a la parte frontal del vehículo.