Más prestaciones y menor consumo
Con 1.497 kilogramos (1.537 kg con cambio “M DKG”) y 431 CV, la relación peso/potencia del nuevo BMW M4 Coupé es de 3,47 kg/CV con el cambio manual y 3,57 kg/CV con la caja “M DKG” (3,76 kg/CV y 3,81 kg/CV respectivamente en el anterior M3 Coupé). Así pues, con más potencia y menor peso no es de extrañar que el actual modelo supere claramente en prestaciones y eficacia al coche que ha sustituido.
Hablando de capacidad de aceleración, el nuevo BMW M4 Coupé alcanza los 100 km/h desde parado en 4,3 segundos con el cambio manual y 4,1 segundos con el cambio “M DKG” (4,8 y 4,6 segundos respectivamente en el BMW M3 Coupé anterior). La velocidad máxima está autolimitada electrónicamente por el fabricante a 250 km/h aunque, por primera vez, se ofrece un paquete opcional (denominado “Drive”) que incrementa dicha limitación hasta una velocidad máxima de 280 km/h.
Pero no solo han mejorado las prestaciones, sino que el nuevo BMW M4 resulta más eficiente en consumo, rebajando la cifra media homologada hasta 8,3 litros/100 km con el cambio “M DKG” (8,8 litros/100 km con cambio manual), lo que supone una reducción superior al 25 % respecto al modelo anterior (que tenía un consumo medio de 11,2 l/100 km con el cambio “DKG” y 12,4 l/100 km con cambio manual).
El nuevo BMW M4 Coupé cumple la normativa anticontaminante Euro 6, con un nivel de emisiones de CO2 de 204 gr/km con cambio manual y 194 gr/100 km con el cambio “M DKG” (295 y 285 gr/km respectivamente en el anterior M3 Coupé). Además, se da la circunstancia de que la versión con el cambio automatizado pagará en España un impuesto de matriculación más bajo (9,75 %) que la versión manual (14,75 %) al tener unas emisiones por debajo de los 200 gr/km, lo que supone un precio de venta al público muy similar en ambas versiones.
Si bien el cambio “M DKG” de siete marchas y doble embrague robotizado incrementa el peso del BMW M4 Coupé en 40 kilogramos, sus cifras de prestaciones y consumo son mejores que en la versión con el cambio manual de seis marchas, evidenciando pues la eficacia del cambio automatizado y su extraordinaria rapidez de respuesta.
