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Ford Mustang Shelby GT350R

Escrito por: Víctor M. Fernández - 6 junio 2017

Especificaciones “R” en la dirección y sus potentes frenos

Como el resto de la Gama Mustang, el Ford Mustang Shelby GT350R cuenta con una dirección de cremallera que tiene asistencia eléctrica y permite al conductor modificar su calibrado con tres programas de ajuste (“Confort”, “Normal” y “Sport”).

Mediante un botón específico ubicado en el volante, el conductor puede seleccionar el grado de asistencia de la dirección, que es más suave en el ajuste “Corfort”, tiene una dureza intermedia en el ajuste “Normal” y encuentra su ajuste más deportivo en la selección “Sport”.

El reglaje “Sport” de la dirección se ajusta también automáticamente cuando seleccionamos los modos de conducción “Sport” y “Track” (mediante otro mando específico situado también en el volante).

El calibrado realizado en el reglaje “Sport” resulta excelente para su uso en conducción a fondo y en circuito, transmitiendo al volante todo lo que está ocurriendo en el eje delantero. El conductor percibe mucha precisión en el guiado y una excelente rapidez de giro, con una acertada desmultiplicación que establece en 2,7 las vueltas de volante entre topes y permite mover los anchísimos neumáticos delanteros con un tacto soberbio.

Los ingenieros de Ford Performance han apostado seguro en el apartado de frenos del Ford Mustang Shelby GT350/GT350R, introduciendo el equipo más potente que ha llevado hasta la fecha un Mustang de producción en serie.

13_Ford-Mustang-Shelby-GT350R_pruebaDelante cuenta con discos de 394 x 36 mm (diámetro x grosor), mordidos por pinzas fijas “Brembo” de aluminio con seis pistones, mientras que el eje trasero lleva discos de 380 x 26 mm con ligeras pinzas fijas de cuatro pistones (las pinzas están pintadas en color rojo en la versión GT350R).

Los cuatro enormes discos del Ford Mustang Shelby GT350/GT350R están fabricados en material compuesto, con los platos de fricción en fundición gris (ventilados y perforados) y la corona interior en aluminio (para aligerar peso). Unos pernos cilíndricos son los encargados de unir ambos elementos de dicha construcción flotante, cuya ventaja reside en su mayor capacidad para disipar la elevada temperatura alcanzada en frenadas al límite y proteger a los rodamientos del buje de un calentamiento extremo.

Cada disco delantero tiene un peso de 13,5 kilogramos, mientras que los discos traseros pesan 8,6 kilogramos cada uno. A pesar de su aligerada construcción siguen sin ser tan livianos como unos discos carbono cerámicos, aunque su precio también es mucho más contenido. Mientras que el precio de unos discos cerámicos similares rondaría los 8.000 euros, el conjunto de los cuatro discos compuestos de fundición y aluminio del Mustang Shelby GT350/GT350R apenas alcanza los 1.000 euros en el mercado americano (300 $ cada disco delantero y 250 $ cada disco trasero).