En el puesto de conducción, todo en su sitio
El nuevo 911 tiene un puesto de conducción perfecto para conducir, con todos los mandos e instrumentos bien posicionados y al alcance de la mano, aunque tiene tantos mandos que requiere un pequeño período de adaptación y aprendizaje, si bien todo resulta muy intuitivo.
Nuestro coche llevaba el volante “SportDesign” opcional, que cuenta en la parte trasera con unas levas para la selección manual de las marchas del cambio “PDK”. Tiene reglaje eléctrico en altura y distancia y permite situarlo en el punto perfecto, con un aro muy agradable en su forma y revestido en cuero de suave tacto.
También llevaba los asientos deportivos “Plus” con múltiples reglajes eléctricos que se ofrecen en opción, un asiento perfecto en su forma, mullido, sujeción lateral y también confort en el uso cotidiano. Además de los reglajes habituales, también permite regular elementos como el apoyo lumbar y su altura, la longitud de la banqueta y la sujeción lateral del respaldo y la banqueta (por separado). De esta manera, el conductor no solo puede encontrar la posición al volante adecuada con verdadera facilidad, sino que también puede ajustar la forma del asiento al contorno de su cuerpo.
En la nueva consola central sobre elevada encontramos un buen despliegue de mandos que quedan perfectamente al alcance del conductor. Todos ellos están bien posicionados y tienen un adecuado tamaño para su cómodo accionamiento, aunque son tantos que requieren un leve vistazo para poder accionar el botón correspondiente.
Además de los mandos del equipo multimedia (con pantalla táctil en color de cómoda visualización y manejo), también encontramos bien agrupados los mandos de climatización del habitáculo y los asientos (calefacción y ventilación). Junto a la palanca de cambios (en una posición elevada y alineada con el volante para su fácil manejo) se han agrupado todos los mandos de manejo de los dispositivos mecánicos (“Sport”, “Sport Plus”, “PSM”, suspensión regulable, alerón trasero escamoteable, sistema de escape deportivo, techo practicable y desconexión del sistema “start & stop”).
La visibilidad no plantea problemas reseñables en este coche, gracias al generoso tamaño de sus espejos retrovisores, si bien, en maniobras de aparcamiento, los sensores de control de distancias de aparcamiento que puede llevar en opción se agradecen especialmente.
En cuanto al equipo de luces, nuestra unidad de pruebas llevaba los faros de doble xenón con sistema direccional activo “PDLS” que se ofrece opcionalmente. Dicho equipo aporta una iluminación eficaz en cualquier tipo de carretera, acorde a las necesidades de un deportivo tan rápido como el Carrera S.