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Seat León Cupra R 2.0 TSI

Escrito por: Víctor M. Fernández - 23 julio 2012

Dirección y frenos de nivel

El León Cupra R tiene una dirección de cremallera muy bien adaptada a las características deportivas del modelo. Con 2,7 vueltas de volante, es rápida y precisa, además transmitir buenas sensaciones en cualquier circunstancia. Su asistencia electromecánica varía en función de la velocidad y aporta un tacto más bien durito y agradable en todo momento.

Tan solo se echa en falta una mayor capacidad de giro, especialmente cuando nos movemos dentro de un aparcamiento subterráneo o en zonas urbanas angostas. No en vano, el Cupra R no es “animal” de ciudad y es en carretera donde marca su “territorio”.

El equipo de frenos también está dimensionado para ofrecer la máxima eficacia en conducción deportiva. Delante tiene discos ventilados de generoso diámetro (345 mm) cuya única crítica puede ser la ausencia de unas buenas pinzas fijas que remataran el conjunto (lleva pinzas flotantes de un solo pistón). En cualquier caso, el León Cupra R ofrece una frenada potente y equilibrada, además de aguantar el trato exigente con eficacia.

El proceso de frenada también me ha parecido mejorable. En el primer instante del recorrido del pedal no hay presión de frenada, para luego “atacar” la frenada de forma contundente. Es cuestión de costumbre adaptarse, aunque tampoco ayuda que los pedales se encuentren situados en una posición tan alta (aspecto que influye sin duda en la facilidad para dosificar la presión sobre el pedal de freno).

El ABS trabaja bien en líneas generales, aunque en determinadas situaciones (en alguna apurada de frenada en medio de un apoyo) entra en funcionamiento antes de tiempo y puede alargar la frenada más de lo necesario.

En cuanto al confort de marcha, está claro que el Cupra R no está concebido para cómodos desplazamientos y su dureza de suspensiones condiciona la comodidad de los pasajeros, aunque la amortiguación tampoco resulta seca. Así pues, no es un coche cómodo aunque sí suficientemente “sufrible” en el uso cotidiano.