La gama Polo estrena versión “R”, un coche inspirado en el Volkswagen Polo R WRC con el que la marca alemana ha obtenido el título en el Campeonato del Mundo de Rallyes 2013.
La versión de calle no es tan espectacular como el modelo de competición, pero sí cuenta con elementos diferenciadores respecto al resto de los Polo y con detalles estilísticos que recuerdan al coche en el que está inspirado.
Así pues, el paragolpes delantero tiene tomas de refrigeración más grandes y un faldón más prominente, mientras que el paragolpes trasero cuenta con un aditamento aerodinámico específico y lleva integrada una salida de escape doble. También destaca el llamativo alerón situado por encima de la luneta trasera y sus exclusivas llantas de aleación de 18 pulgadas, montadas sobre neumáticos en medida 215/35 R18.
A nivel mecánico, el Volkswagen Polo R WRC de calle se distingue por llevar el motor 2.0 TSI (de inyección directa turboalimentado) potenciado hasta los 220 CV y asociado a un cambio manual de seis marchas, en vez del cambio automatizado “DSG” de doble embrague anunciado inicialmente. También cuenta con suspensiones de tarado específico y un equipo de frenos con cuatro discos ventilados que lleva pinzas flotantes pintadas en color azul.
En el interior, el Volkswagen Polo R WRC 2.0 TSI recibe asientos delanteros de tipo bacquet, que llevan el anagrama “WRC” bordado en el respaldo y tienen una tapicería mixta en textil y Alcantara. Los matices de personalización se completan con los pedales en aluminio, las costuras de la tapicería en color azul y el aro del volante revestido en Alcantara (símil cuero vuelto).
El Volkswagen Polo R WRC 2.0 TSI se va a fabricar exclusivamente con carrocería de tres puertas (pintada en color “blanco puro”) y en edición limitada a 2.500 unidades (con el número de unidad identificado en el alerón trasero). Para dejar claro que se trata de una versión especial, este Polo lleva el anagrama “R” situado en la parrilla delantera y el portón trasero, junto con el distintivo específico “WRC” situado en la parte posterior y en los bajos de carrocería.
Las primeras unidades han llegado a los concesionarios en septiembre de 2013, con abundante equipamiento de serie y un precio inicial de 34.860 euros, tan elevado como exclusivo pretende ser este modelo fabricado para todos los mercados en las instalaciones de Volkswagen en Navarra.
