El BMW 3.0 CSL Hommage es un nuevo “homenaje” del equipo de diseño de la marca alemana a uno de los modelos coupé más exitosos de la década de los años 70.
Ha sido presentado como prototipo durante el Concurso de Elegancia Villa del Este de 2015, celebrado a orillas del Lago de Como (Italia), y su llamativa pintura “Golf Yellow” (“Amarillo Golf”) resalta los rasgos futuristas inspirados en el BMW 3.0 CSL original.
Aquel “Coupé Sport Leichtbau” (“Coupé Deportivo Ligero”) de 1971 estaba destinado principalmente para el mundo de la competición y recurría al empleo de aluminio en el capó, las aletas y la tapa del maletero, además de ventanillas de “Plexiglás” y un equipamiento reducido a la mínima expresión, para rebajar así su peso nada menos que 200 kilogramos respecto al BMW 3.0 CS del que partía.
El evolucionado BMW 3.0 CSL Hommage del Siglo XXI reproduce muchos detalles característicos de aquel deportivo coupé nacido hace cuatro décadas, como los deflectores aerodinámicos con forma de “sable” que recorren longitudinalmente las aletas delanteras, el alerón integrado en la parte posterior del techo y el alerón trasero de grandes dimensiones, mientras que aquellas partes de la carrocería fabricadas en aluminio en el modelo clásico han sido confeccionadas con plástico reforzado en fibra de carbono en el moderno coupé. También son de fibra de carbono el faldón delantero “splitter”, las estriberas laterales de los bajos de carrocería y el difusor trasero.
La imagen de este prototipo coupé de competición se realza además con un pronunciado ensanchamiento de las aletas, los llamativos faros delanteros, las luces traseras integradas en el alerón, la salida de escape en un lateral y sus enormes llantas de 21“ de diámetro, con neumáticos en medida 245/35 ZR21 delante y 325/30 ZR21 detrás.
El diseño alargado de los característicos “riñones” de la parrilla frontal es otra reminiscencia más del BMW 3.0 CSL clásico, junto con los marcos cromados que bordean las ventanillas laterales o los emblemas circulares de “BMW” situados en los pilares “C” del techo, pero también se han introducido elementos de vanguardia como los retrovisores exteriores con cámaras o los faros delanteros que combinan la luz láser con la tecnología “LED” y que reproducen en la parte central la “X” realizada con cinta adhesiva que llevaban los coches de carreras en los años 70 (para evitar que el cristal de los faros saliera despedido en caso de golpe).
El interior del BMW 3.0 CSL Hommage muestra una configuración sencilla, típica de los coches de competición, en donde predominan los elementos realizados en fibra de carbono y destaca una moldura de madera que reviste el salpicadero (como lo hacía en el 3.0 CSL clásico en el que se inspira), junto a los colores “BMW Motorsport” (con el color rojo y doble tono azul).
El volante recuerda en su forma al empleado en los BMW M4 DTM de carreras y lleva mandos multifunción integrados y levas de cambio secuencial situadas en su parte posterior, mientras que los asientos bacquet de competición van asociados a cinturones de seguridad de arnés con seis puntos de anclaje.
El cuadro de instrumentos principal es una pantalla en color en donde el piloto visualiza la velocidad instantánea, las revoluciones del motor y el momento de subir marcha, entre otros detalles, mientras que la pequeña pantalla situada en la parte central del salpicadero marca el porcentaje de carga de las baterías.
Un hueco específico practicado en la parte trasera del habitáculo permite colocar dos cascos en tándem y, los detalles propios de la competición, siguen presentes en la estructura de seguridad antivuelco realizada en fibra de carbono y en elementos como el equipo automático de extinción de incendios, las boquillas de salida de la espuma extintora o el mando cortacorrientes, todos ellos resaltados en color rojo anodizado.
BMW no ha desvelado detalles mecánicos sobre el BMW 3.0 CSL Hommage, tan solo que lleva un motor de seis cilindros con “eBoost”, lo que hace pensar que se trata de tecnología híbrida compuesta por un motor 3.0 de seis cilindros en línea (como llevaba el BMW 3.0 CSL original) asistido por un motor eléctrico.
No parece probable que el BMW 3.0 CSL Hommage se lleve a la producción, como ya ocurriera en los otros dos modelos “homenaje” aparecidos anteriormente, el BMW M1 Hommage (2008) y el BMW 328 Hommage (2011).
